La ministra de Comercio Exterior y Turismo, Magali Silva, desmintió cada una las críticas sobre el supuesto perjuicio que significaría para el Perú la firma del Acuerdo Transpacífico (TPP, por sus siglas en inglés) en temas de propiedad intelectual, sobre todo los relacionados al acceso y precio de las medicinas. “Quiero que estén tranquilos: la posición negociadora del Perú favorece la mayor diversidad de medicamentos”, dijo la titular del Mincetur en la conferencia “Acuerdo de Asociación Transpacífico: El nuevo horizonte comercial del Perú”, realizado en la Universidad del Pacífico el martes 14 de julio. El evento fue presentado por Gustavo Yamada, Decano de la Facultad de Economía de nuestra casa de estudios, con participación de representantes de diversas embajadas de países integrantes del proceso de negociación del TPP. Estos fueron los cinco puntos que aclaró la ministra:
1. Patentes intactas
El TPP estará listo a fines de julio y hasta el último momento –aseguró la ministra Silva– el Perú mantendrá el sistema actual de patentes, incluidas las farmacéuticas. Es decir, el plazo de protección será de 20 años, tal como estableció en la Comunidad Andina en el 2000. Así descartó una posible extensión de ese plazo y, por ende, un incremento de los precios de los medicamentos, debido al mayor tiempo de exclusividad en manos del laboratorio titular. En pocas palabras, no se cederá más de lo estipulado en el Tratado de Libre Comercio (TLC) con Estados Unidos.
“De los tres países latinoamericanos que participan en el TPP, el Perú está en una posición de menor desventaja en el caso de propiedad intelectual (respecto a México y Chile)”, opinó Fernando González Vigil, Director del Centro de Estudios APEC de la Universidad del Pacífico, quien se encargó de los comentarios principales. La explicación de esta afirmación –agregó– recae en que el TLC con Estados Unidos pertenece a la última generación de acuerdos bilaterales del país del norte, a tal punto que lo considera como el modelo de negociación comercial con una nación en vías de desarrollo. Y por eso mismo, “es bastante más preciso, detallado y estricto”.
2. Datos de prueba óptimos
La titular del Mincetur también aseguró que los datos de prueba –los estudios que demuestran la seguridad y eficacia de un fármaco– tendrán una protección por cinco años como máximo en el caso de medicamentos con base química, el mismo tiempo que se respetó en el TLC con Estados Unidos. Y “la misma orientación será para el caso de los biológicos”, puesto que no existe legislación al respecto. De esta manera, la ministra Silva despejó dudas sobre otorgar mayor protección a los datos de prueba, lo cual podría obstaculizar la oferta de medicinas e incrementar los precios.
Sin embargo, González Vigil comentó que al Perú le toca “hacer un calibraje” respecto a los fármacos con base biológica. En el largo plazo, la riqueza genética de la biodiversidad del país puede convertirse en una fuente de patentes de este tipo, y en tal escenario al país le “interesaría patentes que tengan los plazos más largos posibles dentro de los 20 años que permite la normatividad de la OMC (Organización Mundial del Comercio)”.
En ese sentido, el Perú tiene “intereses ofensivos” en cuanto a la propiedad intelectual que se negocia en el TPP, según González Vigil. Es menos probable que una empresa auténticamente nacional genere estas patentes biológicas, pero empresas extranjeras podrían invertir en estos insumos genéticos peruanos. Y así “beneficiarse tanto el empresario innovador como el país fuente de materia prima”, a través del pago de regalías.
3. Salud pública asegurada
“No se van a pasar las líneas rojas del TLC con Estados Unidos bajo ningún milímetro: nuestra preocupación es darle mayor acceso a medicinas a todo ciudadano”, dijo la ministra Silva, descartando que el TPP impacte negativamente a la salud pública. Recordó que el temor a que se limite la oferta de medicamentos y se disparen los precios también ocurrió durante la negociación del TLC con Estados Unidos, pero al final sucedió todo lo contrario. Según el Ministerio de Salud, luego de un año de vigencia del acuerdo, los medicamentos oncológicos redujeron sus precios hasta en un 47%. Y los últimos datos estadísticos siguen confirmando esta tendencia: entre el 2010 y el 2014, el mercado farmacéutico retail peruano creció 35%, en datos de IMSHealth; el volumen de importaciones de medicinas creció a un ritmo de 6.2% anual, según la Sunat; y el precio de los fármacos subió solo 2.8% anual, mientras que la inflación trepó 3.3% al año en ese periodo.
Por todo lo explicado, la ministra Silva aclaró que el capítulo de propiedad intelectual filtrado por Wikileaks, el cual levantó críticas sobre la negociación del TPP, solo “generó angustias y riesgos innecesarios, pues no eran textos finales". También pidió no generar más preocupaciones sobre el tema del medio ambiente, puesto que solo se está “trabajando la terminología”, en vista de que “no hay ningún aspecto de fondo. “Recordemos que Perú, habiendo sido sede de la COP 20 el año pasado, lucha por que se haga valer sus principios de cuidado de nuestra biodiversidad”, garantizó.
4. Controversias saldadas
Zanjando otras de las controversias, la ministra Silva aseguró que “el Estado peruano no está aceptando ningún mecanismo nuevo de solución de controversias”. En otras palabras, el país sigue teniendo las mismas fortalezas en caso un inversionista decida demandarlo ante tribunales internacionales. Además, se están negociando salvaguardas que permitan al Perú articular una adecuada defensa, lo que no quiere decir que no sepamos resolver las demandas: en los últimos años, el Estado ha ganado 8 de los 10 casos llevados a arbitraje internacional.
González Vigil cree que todavía hay una gran oportunidad en la negociación sobre este tema. En su análisis, es sumamente necesario acotar los criterios por los cuales un inversionista puede enjuiciar al Estado ante un tribunal internacional. En ese intento, el Perú debería tomar como ejemplo el caso de Doe Run, que demandó al Estado peruano siendo una empresa involucrada en casos de contaminación ambiental. “Cualquier inversionista no debería tener el derecho de ponerse a la par con el Estado. Hay criterios que deben ser importantes. El medioambiente brilla a la vista, pero no necesariamente es el único”, afinó el Director del Centro de Estudios APEC de la Universidad del Pacífico.
5. Acuerdo transparente
El último desmentido de la titular del Mincetur es aquel ligado a la falta de transparencia de las negociaciones del TPP. La ministra Silva informó que su cartera ha realizado 27 reuniones informativas, logrando la asistencia de veinte instituciones públicas y 63 instituciones privadas. Además, ella ha ido al Congreso cada vez que se le ha pedido información sobre el acuerdo. Aclaró que los textos del TPP serán públicos cuando culminen las negociaciones, puesto que las versiones preliminares pueden generar falsas expectativas, debido a que varían a cada momento.
“Aquello del secretismo es francamente un cuento”, opinó González Vigil. Mencionó que si bien no se puede acceder a los textos de las negociaciones, sí están disponibles los resúmenes de un gran número de reuniones. Se puede consultar vía online –informó– unos dieciocho resúmenes de quince páginas cada uno en promedio. Contrariamente a lo que se piensa, el TPP es el acuerdo que más información ha puesto a disposición en los últimos años, según el experto.
Anexo 1. Emparejar empresas estatales
González Vigil se detuvo en un punto clave que no ha tenido resonancia. Advirtió que se deben “emparejar las condiciones de competencia” entre empresas del Estado. Dado que en otros países no hay empresas estrictamente estatales y, a la vez, hay compañías privadas equivalentes a empresas de bandera, el Perú estaría en desventaja en cuanto a las cláusulas de transparencia y coherencia regulatoria. “Nosotros tenemos muy pocas empresas estatales y ninguna de bandera, entonces es importante que los socios en el TPP, que sí las tienen, tengan la necesidad de cumplir con ciertas disciplinas un poco menos laxas”.
Anexo 2. Acceso a nuevos mercados
A través del TPP, el Perú se integrarará comercialmente con 11 economías del mundo. En palabras de la ministra Silva, este tratado significa formar parte del “bloque comercial más grande y dinámico a escala mundial”. Para González Vigil representa la segunda ola de modernidad para el país, después del TLC con Estados Unidos: no solo en los canales comerciales, sino a nivel de las estructuras de los sectores público y privado. Dijo que es como tener de un solo golpe un TLC plurilateral y cinco bilaterales. Sucede que hay seis países del bloque con los que ya tenemos un TLC firmado y para estos casos el TPP servirá para mejorar el acceso de los productos peruanos, rompiendo las barreras sanitarias y fitosanitarias. “El TPP no sustituye a estos acuerdos comerciales, sino que coexiste con ellos, por lo que nuestros exportadores e importadores podrán escoger libremente a cuál de ellos acogen sus actividades cada vez que exportan”, aclaró la ministra Silva.
La novedad está en el acceso a cinco nuevos mercados con preferencias arancelarias: Australia, Brunéi, Malasia, Nueva Zelanda y Vietnam. En la actualidad, exportamos tan solo US$ 36 millones a estos países, mientras que estos importan un monto superior a los US$ 4,000 millones en productos no tradicionales que tiene el Perú, un potencial que será aprovechado con el TPP. Según la ministra Silva, en el corto plazo, se podría exportar US$ 2,250 millones adicionales en frutas, hortalizas, granos andinos, productos pesqueros y textiles.
Y el beneficio no solo es para las grandes compañías, sino también para las pequeñas y medianas empresas (pymes). Esto gracias a que el TPP incluyó dos capítulos propuestos por el Perú: la inclusión social y las pymes. Visto así, según la titular del Mincetur, “es la primera vez que se pone a las pymes en el gran juego del comercio internacional”.
Junto a la ministra Silva, participaron en la conferencia el Embajador de México, Ernesto Campos Tenorio, y el Embajador de Japón, Tatsuya Kabutan. Asimismo, el Ministro Consejero de la Embajada de Chile, José Miguel Capdevilla; el Consejero de Comercio e Inversiones de la Embajada de Canadá, Frederick Caldwell; y la Primera Secretaria de la Embajada de Australia, Sophie Davies. Todos ellos coincidieron en que el TPP es el acuerdo más importante que está por culminar en el mundo.


