El pedido de facultades legislativas del premier Pedro Cateriano ha tomado por sorpresa a la opinión pública. Baltazar Caravedo, director del Centro de Liderazgo de la Universidad del Pacífico, dice que esta decisión no se ajusta a la búsqueda de consenso que venía adoptando correctamente el jefe del gabinete, luego de reunirse con los principales líderes políticos: “No encaja con la lógica del discurso que ha venido sosteniendo, que es diálogo, diálogo y más diálogo”.
Cateriano solicitó facultades legislativas para tres asuntos: reanimar el crecimiento económico, darle continuidad a las políticas sociales y fortalecer la lucha contra la corrupción, narcotráfico e inseguridad ciudadana. En la práctica, la cancha trazada por el premier es muy amplia y vendría a ser todo lo contrario a implementar las políticas de manera concertada. “Ahora lo que [Cateriano] estaría buscando no es consenso, sino mayoría política –dice Caravedo–. De pronto, quiere entrar en un segundo momento de diálogo y ver quiénes se adhieren al otorgamiento de facultades”.
En la lectura de Christian Donayre, profesor de Derecho de la Universidad del Pacífico, el gobierno de Ollanta Humala estaría buscando que Gana Perú llegue con buen rostro político a las próximas elecciones presidenciales. Si el Congreso le otorga facultades, ya tendría un plan para ejecutar medidas de impacto inmediato, con el consiguiente rédito político. Y si la respuesta es negativa, podría justificar su inoperancia en la indiferencia de los parlamentarios ante sus pedidos. “Es como ‘soplarle la pluma’ al Congreso”, dice Donayre. Es decir, eludir una responsabilidad atribuyéndosela a los congresistas. “A un gobierno que está de salida no le resulta tan inconveniente pedir facultades legislativas –agrega–. En un año preelectoral, podría verse como una estrategia política”.
Ambos docentes de la Universidad del Pacífico coinciden en que es más factible que el gobierno consiga el permiso para legislar en materia de inseguridad ciudadana, debido a dos razones: 1) hay un consenso de la urgencia de acabar con la delincuencia y 2) las medidas propuestas por Cateriano son más específicas en este tema en comparación con los demás planteamientos.
En cambio, respecto al ámbito económico, la tarea no sería fácil: “El ministro de Economía, Alonso Segura, no se ha ganado el espacio de reconocimiento para otorgarle facultades legislativas, pues las medidas que ha tomado para reimpulsar la economía no han funcionado”, dice Caravedo. Además, los temas económicos propuestos son muy generales, al igual que los referidos a la política social.
Donayre cree que el Congreso no le dará carta libre al Ejecutivo para legislar sobre tópicos muy amplios. No solo porque la oposición recalcitrante no se lo permitirá, sino porque la Constitución Política dicta que las facultades legislativas deben otorgarse sobre materia específica. Habrá que esperar el proyecto de ley del Ejecutivo para determinar tales circunstancias, puesto que solo basta con el voto de la mayoría simple del Congreso para que se apruebe la solicitud del premier Cateriano.
(Foto: Andina)