Ninguno
Bruno Seminario: “Si seguimos así, al nivel prepandemia se llegará en 3 o 4 años”
30 de noviembre de 2020

Profesor de Economía de la Universidad del Pacífico advierte que es muy lenta la reactivación económica por lo que urge elevar los niveles de inversión pública, que a su vez generará mayor empleo. Entrevista publicada por el diario Correo.

El segundo drama del Perú tras las miles de muertes dejadas por el COVID-19 es, sin duda, la calamitosa situación económica en que ha quedado en el país y sus sombrías perspectivas para el 2021. En diálogo con Correo, el profesor de Economía de la Universidad del Pacífico, Bruno Seminario, hace un balance de lo que ha pasado pero, sobre todo, se proyecta al futuro inmediato en el contexto de una situación que, de no administrarse con responsabilidad, podría volverse peligrosa.

Tras la crisis política viene la calma, pero, ¿Qué hacemos con el Congreso?

No sé si se va moderar o no el Congreso, no lo puedo adivinar. Se supone que debería moderarse. De hecho, el daño de lo que ha ocurrido en los dos últimos meses se manifiesta en la velocidad de la economía, que se  venía recuperando y cuyo crecimiento se ha reducido notoriamente. Los datos oficiales no lo van a mostrar. La economía crece, pero no en la velocidad que se necesita  para una recuperación rápida. Si seguimos así, el Perú demorará entre 3 y 4 años para recuperar el nivel que se tuvo antes de la pandemia. La culpa de esto es, efectivamente, todo el enfrentamiento que hubo entre el Ejecutivo y el Legislativo, que provocó retraso en la ejecución de los proyectos de inversión pública que son vitales para garantizar que la velocidad de la economía continúe. Ahora, eso está en peligro.

¿Qué opina del nuevo ministro de Economía?

Tenemos una ventaja, el ministro Waldo Mendoza es economista y es plenamente consciente de la situación. Sabe qué es lo que puede pasar. Efectivamente, cuando estuvo en el Consejo Fiscal, por la crisis, suspendió inmediatamente la aplicación de las reglas fiscales porque era la forma correcta de proceder, por la velocidad con que venía la crisis. En este caso, no creo que él tenga ningún problema, sabe cuáles son los temas fiscales  y adoptará las políticas necesarias para solucionarlos.

Es clave que se preocupe por el equilibrio fiscal, ¿verdad?

No significa que no deba haber déficit fiscal, es inevitable no tenerlo. Claro, lo que no se debe hacer es crear gastos como los que propone el Congreso porque esos gastos no ayudan a reactivar la economía, pero retrasan las políticas que sí ayudan a reactivarla. Solo producen una reducción de la tasa de crecimiento.

¿Qué se debe priorizar para acelerar la reactivación económica?

La inversión pública. Primero, porque tiene un evidente efecto sobre la economía. Segundo, porque es la mejor forma de solucionar el problema masivo que es el desempleo. Actualmente todavía quedan 2 millones de personas desempleadas solo en Lima Metropolitana, lo que denota que la economía no alcanza el nivel de prepandemia. Si hay tanta gente desempleada, hay un bajo nivel de consumo y la economía sigue por debajo del nivel prepandemia. Entonces, hay que escoger herramientas fiscales más efectivas, que  estén asociadas con la inversión pública, con el gasto de capital del Gobierno.

¿La inversión pública empezó a recuperarse en octubre?

La inversión pública recién comenzó a recuperarse, ya debería haber crecido. Se suponía que iba a crecer fuertemente en el cuarto trimestre del año, pero tal como están las cosas, se han producido retrasos y su crecimiento se aplazaría hasta el próximo año, si no (crece) no se logrará aumentar la velocidad de la economía.

Pero, ¿se necesita la colaboración de los gobiernos regionales y locales?

Hay que recordar que los gobiernos locales administran alrededor del 50% de la inversión pública y de las transferencias, pero, normalmente, no gastan los recursos, hay una incapacidad de gasto. Si gastaran los fondos, teóricamente, ayudarían a la reactivación, es un problema complicado de solucionar. Sería ideal que los gobiernos regionales y locales acompañaran al gobierno nacional en este impulso decisivo de las inversiones públicas  porque es una forma rápida de solucionar el tema del empleo. Una vez que la inversión pública levante la economía, se tendrá un conjunto de impactos indirectos que volverán a mover el consumo y se pueden solucionar el tema del empleo. El efecto multiplicador en este tipo de inversión es de 1.4, es decir,  por 10 empleos que se generen, se crearán aproximadamente 14 más. Sin mucho gasto, se puede aumentar la tasa de crecimiento. Hay que acordarse de la necesidad de construir infraestructura de salud.

¿Cree que se dará una segunda ola del COVID-19 en el Perú?

En Europa ya se dio la segunda ola. Aquí, la gente piensa que no habrá una segunda ola porque el Perú alcanzó cierto porcentaje de contagio. Es un riesgo eminente que puede volver a paralizar la economía como en Europa.

¿Riesgo eminente?

Hay que mejorar la infraestructura de atención pública de salud. Se ha mostrado su deficiencia. Esta epidemia es la primera que vamos a pasar, pero luego vendrán otras en el futuro. Todas están vinculadas al cambio climático. En el Perú no hay suficientes camas. En unos cuatro o cinco años, hay que invertir en hospitales públicos. Con el COVID-19 se ha palpado que no se tienen infraestructuras simples como plantas de oxígeno. Se ha visto que el sistema de infraestructura de salud ha estado pegado con babas. Si hay otra epidemia, miles de personas morirán. Por no atender debidamente la emergencia en salud, el PBI cayó 40%. Para esto no se necesita política fiscal de largo plazo. El sistema hospitalario no es una cosa transitoria por lo que urge de inversión pública. Las vacunas necesitan infraestructura, la de Pfizer necesita sistema de refrigeración especial, el Perú no tiene capacidad de congelamiento, hay que construirlo. Las clínicas privadas tuvieron un comportamiento especial durante el COVID, por lo que es urgente construir infraestructura de salud pública. Hay que invertir fuerte en Salud. Es la forma ideal de reactivar la economía. Las iniciativas del Congreso no tienen un impacto en la inversión pública.

Se justifica una mayor deuda para el Presupuesto 2021, ¿verdad?

Se tiene que consignar deuda pública porque es considerable la caída de los ingresos tributarios y será mayor si la economía no se recupera con rapidez.  El déficit fiscal sumaría 41 mil millones de soles, casi 10 mil millones de dólares. En realidad no es mucho dinero para el Gobierno. El PBI del Perú es de unos 200 mil millones de dólares y la deuda pública llegaba al 20%, un nivel que se considera sostenible. Perú aún puede duplicar su deuda. Obviamente, el déficit no puede ser permanente. Alcanzado los niveles de producción prepandemia hay que reducir el déficit.

¿Por ello Perú mantiene su calificación crediticia?

No me preocupa la calificación de los inversionistas, preocupa más reactivar fuertemente la economía. Depende del ministro de Economía mantener la estrategia de política fiscal, lograr reactivar la economía y tomar medidas para iniciar el proceso de consolidación fiscal. Ahora tenemos un buen ministro de Economía, pero ¿después del 28 de julio? No sabemos quién ganará las elecciones  y si los proyectos de inversión pública se  detendrán nuevamente. Si se elige un gobierno poco experimentado, se paralizará la inversión pública hasta que aprenda el manejo del Estado, lo que provocará un retroceso en el proceso de recuperación y el gran problema es que cuanto más extenso es el período de recuperación, la deuda que se tiene que tomar se prolonga y se corre el riesgo de llegar a la zona de peligro del 40% del PBI de endeudamiento. Este es un serio problema, por eso insisto en la velocidad en el proceso de recuperación, porque los ingresos tributarios dependen de esto: Cuanto más rápido se recupere la economía, más rápido crecerán los ingresos tributarios y se cerrará gradualmente el déficit.

Etiquetas
coronavirus crisis financiera políticas públicas

​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​​

Noticias recientes
Estudiantes de la Universidad del Pacífico obtienen segundo lugar en el Scotiabank International Case Competition 2024
Rodrigo Rivera (Administración), Camila Fernandez (Economía), David Ordinola (Ingeniería Empresarial) y Rafael Castro (Economía) son los integrantes del equipo UP que destacó en la prestigiosa competencia internacional.
Compartimos sueños, transformamos vidas: 1ra campaña de recaudación de fondos para becas de pregrado
La campaña impulsada por la UP buscó promover la generosidad de nuestra comunidad a través de un propósito común: igualdad de oportunidades de acceso y continuidad en la educación superior, que permitan transformar la vida de jóvenes peruanos e impulsar su sueño de convertirse líderes con propósito. La comunidad UP se consagró con más de 200 benefactores, los cuales permitieron que 11 estudiantes fueran seleccionados para recibir becas de accesibilidad y continuidad.